El desarrollo motor grueso y fino, también conocido como
motricidad fina y gruesa, está relacionado con las áreas motoras de la persona,
de posición y movimiento, que entran en juego.
Las diferencias entre el desarrollo motor grueso y el fino
residen en las áreas implicadas. La motricidad gruesa está referida a
los cambios de posición del cuerpo y a la capacidad para mantener el
equilibrio, es decir, que implica el uso hábil del cuerpo como un todo e
incluye la postura y la movilidad.
El área motora fina se relaciona con los movimientos finos
coordinados entre ojos y manos, implica el uso de partes individuales del
cuerpo, como decimos especialmente las manos, aunque también otros grupos de
músculos pequeños.